Cada noche se repite su excursión a la heladera
de otro modo no hay manera, solo así puede dormir
De mañana le promete a la verdad de la balanza
no perder las esperanzas y ayunar hasta morir
Pasa el día entre yogures reduciendo calorías
y al final se descontrola y se deja seducir
A la moda entalladita los zapatos puntiagudos
con rubor mostrando el pupo y el suplicio por los pies
Igual que sus camaradas que militan contra el peso
luchadoras del exceso de la furia del comer
guerrilleras temerarias terroristas de inmolarse
que podrían estrellarse contra un pobre canapé
Amor divino, nutriéndose
amor prohibido, entregándose
Amor al arte, de masticar
que siempre es poco, amor carnal
Observando en la Farmacia a una mujer cuando se pesa
de reojo mira y piensa es mi tamaño o algo más
Y esa aguja se detiene, marca varios kilos menos
y tragando cual veneno está a punto de gritar
Farmacéutico asqueroso repulsivo mentiroso
esto lo hacen a propósito queriéndome humillar
En la esquina ve una Iglesia y se imagina que ella es Eva
hoy le toca una manzana y resistir la tentación
pero al lado una vidriera y la serpiente que conspira
milanesas papas fritas la gaseosa en promoción
y ese olor cruza su pecho como flechas de cupido
y el ardor trae al descuido y va a comprar una porción
Amor divino, nutriéndose
amor prohibido, entregándose
Amor al arte, de masticar
que siempre es poco, amor carnal
