Como un ángel de sueños, tras mis pasos
Bajas a la mañana, soñoliento
Con la cara pintada de señuelo me tiras la risa, por si cedo
A la caricia torpe que acomode tu pelo
Tu pelo lacio y rubio, como una carcajada sin aliento
Como no he de ceder a ese duende sonriendo
A ese duende que tiene en su pequeño imperio
Mi niñez aferrada a su niñez corriendo
A ese duende que puede, con solo alzar el vuelo
Dejar atrás la tierra como si ya fuera tiempo.
De que el hombre se entere que el niño es el intento
De tener la alegría los duendes y los cuentos
Guardados en la caja sonora del recuerdo
Por si un día despertara de la vida, ese mal sueño
A ese duende que tiene en su pequeño imperio
Mi niñez aferrada a su niñez corriendo
A ese duende que puede con solo alzar el vuelo
Dejar atrás la tierra como si ya fuera tiempo.
De que el hombre se entere que el niño es el intento
De tener la alegría los duendes y los cuentos
Guardados en la caja sonora del recuerdo
Por si un día despertara de la vida ese mal sueño
A ese duende que puede, con solo alzar el vuelo
Dejar atrás la tierra como si ya fuera tiempo.
