A la huella que es ancha
se va el silencio
con su mansa mirada
nos deja entrar
en el polvo malambo
que levantamos
crece un coro de perros
a rezongar
Con su rebaño alto
nos sigue el cielo
por la pobreza
del pajonal
en el hondo del alma
llevo el desvelo
de una esperanza en brasas
que va y que va
mi potro echando espuma
me pide rienda
sus orejas se achatan
sobre el jadear
el sudor como aceite
de las verijas
de un sueño atropellando la inmensidad
Por un tunel de estrellas
voy galopando
como viento trenzado
con pedernal
a la tierra redonda
la hacen los cascos
salpicados de verde
de mi bagual
Con su rebaño alto.......
Mi potro echando espuma......
A la huella que es ancha
llega el silencio.