No ha venido, y sigo aquí
en este bar
van dos horas y entendí
su no va más
y al pedir otro café
me doy vuelta y puedo ver
a una mujer, sentada sola
Me parece que también espera
el mozo que llega
y ella queda a tras
Y a mi espalda
esos ojos me llenan
de felicidad
Ya imagino que el rencor
nos unirá
nos plantaron a los dos
hicieron mal,
y apurando este café
pido otro para ver
que siga allí, sentada sola
Y ella lee, ya quedo de espaldas
el mozo me sirve,
y puedo asegurar,
que leyendo está
disimulando,
que quiere mirar
Cuando le hable le diré
nos pasa igual
si está sola y yo también
tal para cual
en lo ingrato ni pensar
y me pido otro café
para observar, si se nos nota
Y ella sigue fingiendo
que lee
simula y percibe
nuestra situación
y así llega el café
y hasta el mozo
refleja emoción
El que espera, si no desespera
encuentra sincera y mejor atención
lo importante es seguir a delante
ser alguien constante, y con imaginación
Y ya van cuatro café
para girar
darme vuelta y observar
que sigue a tras
Esta vez voy a tardar
busco al mozo que no está
y aprovechar, mirarla toda
Y girando, parece mentira,
la miro y me mira
y el mozo también
que ahora viene,
se cruza en el medio
trayendo el café
Y apurando este café
vuelvo a girar
pero el mozo ya me vio
grita que “ahí va”
Y al instante me sirvió
se retira mientras yo
sufro al quedar de espaldas a ella
Esta última taza la tomo de un trago
me quema, me quema
y ya vuelvo a girar
pero el mozo
gritando “ya sale”
me trae otra más
Muchas más me quemarán
lo estomacal
no podrán con la ilusión
lo espiritual
y me traen otro café
que me importa que sean cien
si aquel querer, está a mi espalda
Vuelve el mozo
con paso cansado
el rostro agotado
es mucha emoción
ver dos vidas
en el punto exacto
de hallar el amor
El que espera, si no desespera
encuentra sincera y mejor atención
lo importante es seguir a delante
ser alguien constante, y con imaginación
La pregunta no está en las montañas
ni va en las hazañas del escalador.
Es el don que las mueve en la vida el
que cierra la herida, con imaginación